Carnaval de Venecia. Un viaje al pasado más barroco.

El Carnaval de Venecia es uno de los más famosos del mundo. Este evento popular se remonta al S. XI, aunque no se declaró como fiesta hasta el S. XIII

A diferencia de otros carnavales donde impera el colorido, las plumas, los brillantes y el ruido, el carnaval de Venecia es único por sus vestimentas de carácter aristocrático y sus máscaras blancas, doradas o plateadas inspiradas en el S.XVII. 

Estos trajes de exquisito gusto y elaborada confección son uno de los símbolos de la ciudad.

En el máximo esplendor del S.XVIII, muchos aristócratas europeos acudían a la ciudad-estado en busca de diversión. La nobleza se ocultaba tras las máscaras y se mezclaba con el pueblo.

Se suspendió en la época de la ocupación napoleónica, por miedo a las conspiraciones y no se recuperó hasta el S.XIX.  En 1979 fue declarado como fiesta oficial. Al contrario que en otras partes del mundo, este carnaval dura más de10 días. 

El objetivo es fotografiarse con los mejores disfraces e incluso llevar a tu fotógrafo al lado para que te inmortalice con las galas más esperadas del año.

La célebre ciudad italiana ha jugado un lugar muy importante a lo largo de la historia tanto a nivel económico o político como a nivel cultural. 

Su situación geográfica privilegiada la convirtió en centro del comercio mediterráneo, vínculo con el lejano Oriente y la ruta de la seda, y fue una de las ciudades-estado más poderosas de Europa durante años. 

Entre todo ese florecimiento, guerras y conflictos vividos, Venecia encontró su foco de atención gracias a su famoso carnaval.

El carnaval se venía celebrando desde mucho antes, a través de sus distintas variaciones, pero existen documentos históricos que apuntan a Venecia como la ciudad en la cual surgió de manera oficial este acontecimiento anual.

Desde el siglo XIII, el archipiélago italiano le ha dado forma, hasta convertirlo en una versión única en todo el mundo.  

Su primera misión era la de conceder al pueblo llano y las clases bajas unos días de descanso y entretenimiento en los que sus obligaciones o las restricciones sociales quedaban pausadas por un breve periodo de tiempo. Venecia es uno de los pocos lugares en los que esta fiesta conservó mejor su carácter civil, sin ser este sustituido por la tradición religiosa.

El atractivo del carnaval es su estética barroca y es una experiencia que se debe vivir al menos una vez en la vida, aunque después de este viaje al mismo centro del carnaval veneciano, creo que alguna de nosotras volverá a repetir.

Si quieres disfrazarte, no te preocupes, aquí encontrarás todo lo necesario para convertirte en una auténtica mujer barroca,  u hombre.

Solo hace falta dar un paseo por el centro de la ciudad, para adquirir todo tipo de máscaras y atuendos y pasar desapercibido en la semana más loca del año.

Por supuesto el ingenio tiene premio, bolsas de basura o periódicos usados son aptos para usar, además de que el planeta te lo agradecerá por contribuir con el reciclado. 

En la infinidad de puestos callejeros y tiendas locales podrás encontrar tu disfraz al más puro estilo Luis VXI y posar en la pasarela junto a las góndolas. La diversión está asegurada.

Y además de mirar podrás disfrutar 😉

✍🏼 Texto y 📷 Fotografías: María Carrión

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