El monasterio de los monjes blancos y lo que quedó de un gran monasterio cisterciense.

 ¿Quién le iba a decir a Alfonso VII que algún día, ese solar que entregó a Ponce de Cabrera para que erigiese un monasterio de la orden de San Benito, fuese hoy en día las ruinas de lo que fue una de las obras de arquitectura cisterciense más impresionantes?


A esta obra del S.XII, remodelada más tarde al gótico, se le atribuye el honor de ser el primer monasterio de monjes blancos* en España.

Los monjes blancos, se establecieron en estas tierras poco accesibles y consiguieron transformarlas en aptas para ser utilizadas.

Y son ellos, los monjes de este cenobio que con la ayuda del campesinado de estas tierras, ayuda real y nobiliaria, contribuyen mediante su trabajo de desecación de lavajos* y buhedos* intensificar los cultivos e incrementar la ganadería.

Que pena que este coloso en ruinas solo sirva para quedar impreso en los objetivos de nuestras cámaras, para disfrute del peregrino y foráneos que nos acercamos hasta aquí admirando y  lamentando lo que fue este monasterio y lo que es hoy en día.


Para entender estas ruinas  debemos retroceder al año 1131, cuando Sancho y Pedro, dos monjes blancos llegaron a Moreruela y con el apoyo de Ponce de Cabrera, gracias a Alfonso VII, iniciaron un gran desarrollo económico, espiritual y administrativo de todo este territorio.

Después de la construcción del monasterio se vivió un gran periodo en esta zona, hasta finales del S. XIX tras la desamortización de los bienes religiosos. En esta época el monasterio permanecía prácticamente intacto. 


La iglesia data de la segunda mitad del siglo XII, probablemente se iniciaría en el año 1162 como indica una inscripción en la cabecera "ERA: MCC

La construcción se inicia con un estilo románico puro, pero va evolucionando al ojival, posiblemente debido a no ponerse de acuerdo como en muchos edificios de la época tardorrománica. Todo apunta a explicar la influencia directa de algún monasterio cisterciense borgoñón de donde vino la inspiración.

La construcción fue a lo grande, con grandes sillares de piedra cuarcítica, que incluso hoy en día se aprecian  marcas de cantero que saltan a la vista, aunque no prestes atención.



La iglesia fue un enorme edificio, con unas dimensiones más propias de una catedral, que las de la iglesia de un monasterio.

Con una nave central mucho más ancha que las laterales, un amplio transepto* bien conservado, una inmensa y compleja cabecera constituida por  presbiterio y  capilla mayor semicircular rodeada por girola de una nave que se abre a siete capillas radiales de planta ultrasemicircular.

Los hastiales de los brazos del transepto son un ejemplo de la monumentalidad y austeridad perseguida por los monjes blancos. En ambos hay un óculo* en la parte superior, mientras que en el sur también se añadió una pequeña y cuidada puerta.


Las dependencias que mejor han sobrevivido, son las adosadas al claustro y corresponden con las tareas de los monjes: sacristía, sala capitular, hueco de escalera de acceso al dormitorio de los monjes, pasillo de comunicación entre el claustro y la huerta y la sala de los monjes.

A principios del S.XX , el monasterio comienza su declive, la iglesia del pueblo cercano a Moreruela se construye con los materiales del hastial* occidental de la iglesia del monasterio. Más tarde fue el muro de cierre de la nave lateral norte. 

A partir de estas fechas se convirtió en cantera gratuita para todas las construcciones de la zona. 



En 1928, aparecieron los saqueadores del patrimonio arquitectónico español, que actuaban por encargo de arquitectos norteamericanos y se llevaron el vestíbulo, las bóvedas de la capilla del monasterio y muchas cosas más.



Miguel de Unamuno escribió estas palabras: “Hoy la Granja son ruinas. Lo único que permanece igual es el verde florido valle, el convento de las resignadas encinas que abrigan a los pajarillos, que sin cesar cantan la gloria del Señor, y cantándole le buscan y le encuentran”.

En 1931 fue declarado Monumento Nacional, pero ya poco se pudo hacer y la degradación continuó en años siguientes, hasta que la Junta de Castilla y León lo compró. 



En la actualidad son unas ruinas controladas, donde se aprecia la grandeza de lo que fue este monasterio cisterciense.



*Monjes Blancos: Monjes cistercienses, llamados así en la edad media  para distinguirlos de los benedictinos o monjes negros. Los monjes cister vestían túnicas blancas y escapulario negro, retenida por un cinturón que llevaban por debajo y la tradicional cogulla (capucha)  monástica de color blanco.

*Lavajos: Lugares pantanosos

*Buhedos: charcas

*Hastial: parte superior en forma triangular que presenta la fachada de un edificio cubierto con un tejado a dos vertientes.

*TranseptoNave transversal que forma el brazo corto en una iglesia de planta de cruz latina.

*Óculo: Especie de ventana en forma circular o de óvalo, el vocablo procede del latín "oculus" (Ojo) 

Información obtenida en varias páginas de patrimonio español y Junta de Castilla y León.



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Texto ✍🏼 y fotografías 📷: María Carrión 




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